En los pacientes que presentan las defensas bajas se debe tener sumo cuidado en la alimentación
Los alimentos pueden ser vectores de enfermedades, por ende, es importante tomar las siguientes precauciones:
Consumir alimentos que estén bien cocidos.
Lavar muy bien los vegetales para evitar que los microorganismos queden en ellas.
Utilizar utensilios limpios y guardar los productos en la nevera hasta el momento de ser consumidos.
Fiambres y embutidos: no deben dejarlos fuera de la heladera.
El huevo debe estar muy bien cocido por el riesgo de salmonella.
Es aconsejable no usar mayonesa casera.
La leche conservada en el envase abierto puede contaminarse.
Beber siempre leche pasteurizada, nunca ordeñada.
Respetar la cadena de frío de los alimentos.
Hervir siempre la leche antes de beberla o usar leche en polvo.
No consumir mayonesa casera, ya que los huevos crudos que se empleen para elaborarla pueden contaminarla.
El riesgo mayor es que el número de microorganismos peligrosos presentes en un alimento pueda incrementar los niveles de riesgo en el momento de ser consumidos.
En el hogar, puede pasar en los alimentos cocidos que hayan sufrido un proceso de manipulación, (cóctel de mariscos, ensalada con trozos de jamón o queso, etc.) y en los que están a temperatura ambiente unas horas.
No se debe conservar más de 48 horas en la heladera un producto ya cocido.
Los alimentos más susceptibles de desarrollar microorganismos son los proteicos, los ricos en agua y los no ácidos, como carnes, huevos o pescado.
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